Una llamada y 400 km en todo la alto para "adoptar"
este precioso ejemplar del que nadie se acordaba en el momento "máquina" que estaba viviendo.
Gracias Gerardo, un saludo.
Lo dicho, 400km y somos uno más en casa.
No estabamos preparados para lo que llegaba a nuestras
manos, tuvimos que apañarnos con lo que teniamos,
una maceta de plástico y un injerto de otra similar.
Con microtubo de riego y aluminio chino fino,
decidimos fijarlo al invento de maceta a base de tensores.
Cuatro tensores en cruz y por eje tensando
a la par y a la vez, Rafa y Paco.
Fijada la maceta tocaba decidir el tanto por ciento
de masa verde proporcional que había que eliminar
después del destrozo de raices que le habían hecho.
...creo que se vé nuestra cara de preocupación.
...y ya decidido y a cuatro manos, nos ponemos
al lio. Sesión de peluquería con mucho mimo.
¡SE LO MERECE!
Los ultimos retoques de corte y a otra cosa.
Ya mucho más tranquilos, y bromas aparte,
vamos a la cura de cicatrices de todos los cortes.
....salivita, selladora, paciencia y un cafetito de Ana.
Un buen puchero casero, hormonas, compuesto
vitáminico con muchas B.
El cocinero es Rafa.....
Y esperamos que con el tiempo podamos ver un
buen resultado.
Buen trábajo compañero.
AGREDECIMIENTOS: A Gerardo por ser tan buen amigo y sobre todo a esas mujeres
que soportan kilómetros, manías
y hobbies.
